Esta Iglesia quiere servirle a usted... no es ésta una iglesia exclusiva ni rica. Aquí todo es muy sencillo. No es su propósito alimentar la vanidad o el orgullo con un despliegue de ostentación. Como simple fraternidad neotestamentaria, existe aquí con el fin de llamar a sus vecinos al Cristo y al Dios de la Sagrada Escritura. Están abiertas sus puertas a aquellos quienes, desde la profundidad serena del corazón, quisieran acercarse a Dios por medio de la adoración reverente y una vida de obediencia.

      Hay muy poco en esta iglesia que se encontrará preparado para uno de antemano. No hay credo predeterminado; uno ha de aceptar la palabra de Dios y formular su propio "credo", creyendo con todo el corazón todo cuanto enseñe. No hay oraciones prescritas; cada persona expresa su propio anhelo ferviente de conocer mejor a Dios, y de recibir de El toda provisión necesaria. Aquí tampoco hacen otros la música para uno; juntos cantamos, y así produce cada individuo su propia música, que es agradable a Dios en proporción a la sinceridad y humildad del adorador.

       Esta pequeña iglesia no representa ninguna denominación. Sencillamente representa aquello de que todas las sectas reclaman ser una parte  -la iglesia de Cristo-, la iglesia que El edificó sobre la verdad de su filiación divina, la iglesia que El ganó con su sangre, la iglesia que es para El su esposa. Existe para unir a los creyentes en Cristo, y protesta en contra de la división y falta de confraternidad reflejada por el denominacionalismo.