|
|
|
La Iglesia es... El Cuerpo de los Salvos. La Biblia describe a la Iglesia como el cuerpo de Cristo (Efesios 1:22,23) y a Cristo como el Salvador del Cuerpo (Efesios 5:23). Por ello la Iglesia es el cuerpo de los Salvados El Cuerpo de los Salvos de todas las Naciones. En la era Judaica se excluyó a las personas no judías de las bendiciones de Dios. Pero cuando Cristo murió en la cruz, derribó la pared de separación quitando la ley antigua (Efesios 2:14,15). Así cualquier persona que desee ser salva puede ser unida a la Iglesia, al cuerpo de Cristo. Siendo la fe y el bautismo los requisitos y las condiciones de salvación. Una Familia de Comunión. Dios es el Padre, Cristo es el hijo primogénito de esta familia y los miembros de la Iglesia son los hijos de Dios y hermanos del Señor Jesucristo (Romanos 8:14-16). Los miembros de la Iglesia piden a Dios como su padre y aman a los miembros de la Iglesia como hermanos carnales. Los miembros se ayudan y apoyan mutuamente (Galatas 6:1, Santiago 5: 16, 19,20).
La iglesia también es el reino de Cristo (Colosenses 1:13). Un reino espiritual, compuesto de todos los salvos. Siendo Cristo el rey, los cristianos deben permitir que él gobierne sus vidas. Pero cada cristiano debe obedecer las leyes de su país, siempre que no contradigan la ley de Dios (Romanos 13:7) Dios planeó la Iglesia como un reino de servicio, que fuera una bendición para el mundo, ya que el cristiano debe ayudar al necesitado, hacer bien a todos (Galatas 6:10)
La Iglesia es además el templo espiritual, o santuario de Dios. En el Antiguo Testamento era el edifico material donde moraba el espíritu de Dios. Ahora la Iglesia es la casa espiritual edificado con gente redimida (1pedro 2:5, Hechos 5:11,14:27). El espíritu de Dios mora en el templo, que es el corazón de cada cristiano (1 Corintios3:16, 6:19). Donde cada cristiano es un sacerdote a la orden del Sumo Sacerdote Cristo Jesús. Una Nación Santa y Pura. Efesios 5: 27, Filipenses 2: 15.
Poner la Mirada en Dios
“Poned la mirada en las cosas de
arriba, no en las de la tierra” En la actualidad, existen tantas cosas en el mundo, las cuales invaden la mente del hombre. Lleno de estos pensamientos, no queda más espacio en la mente del hombre para poner su mirada en las cosas celestiales.Se nos exhorta a mantener en nosotros, una mente espiritual, la cual, podemos lograr esforzándonos en buscar las cosas que nos hacen bien, las cosas que estarán en nuestra mente, y que por lo tanto nos mantendrá atentos a buscar a Dios.La ideal, es que se llevé a cabo esta exhortación; pero nosotros no hemos comprendido aún , que todas las cosas relacionadas con este mundo, de nada nos son provechosas, sino; que al contrario, de traernos la vida eterna, poco a poco nos está llevando a la perdición total, a la pérdida de la oportunidad, de estar al lado de nuestro Dios.
Que los deseos del mundo no nos invadan. Es cierto que vivimos en este mundo,
pero no pertenecemos a él. Somos ciudadanos del cielo, y sólo estamos de paso
en este mundo, por lo tanto; nuestra mirada y esperanza, se encuentran en la
ciudad celestial. Para que la mundalidad no nos invada, y no nos aparté de Dios, obedezcamos a la voz de Dios, por medio del apóstol Pablo “concéntrense en las cosas celestiales” (versión La Palabra de Dios para Todos, N. T.); es decir, enfocar todos nuestros sentidos en las cosas de Dios, ya que ellas nos alejarán por completo de las cosas del mundo. De esta manera no habrá lugar en nosotros, para que nos invada la mundalidad, sino; que en nosotros, existirá una completa espiritualidad. Una espiritualidad que llenará nuestro ser de confianza, de gozo, de alegría, de esperanza, porque sabremos que habremos de recibir las bendiciones de Dios.
|
Si tiene dudas o comentarios sobre esta página, contáctenos a [ic_jonathan@msn.com] todos sus comentarios y aportaciones son importantes para nosotros colabore en nuestras secciones Gracias por su visita, le esperamos nuevamente |
